New York.
Es raro, New York es bocinazos, rascacielos y muchedumbres, sin embargo me capturó la luz solitaria de esta estación en Brooklyn . Eran perfectas, intocables, efímeras. Ahí estaban todos los negros, sus grises y el brillo de esos blancos absolutos. La luz es la que descubre lo oscuro y hacer foto es eso; es dibujar con la luz.
Ver en blanco y negro es un ejercicio que no siempre me resulta, trato, pero entre la escena única que alienta, la reflexión necesario, la espera eterna por lo ideal, lo preciso, esa inútil necesidad de decir lo que a nadie le importa… eso es para mi hacer fotografía; un azar que juguetea con un algoritmo que no quiero ni busco entender.